AUTOESTIMA

¿Qué es la autoestima?
La autoestima se podría definir como lo que a cada uno le gusta de su autoimagen, lo satisfecho que esté de ella y la coherencia que existe entre esta imagen y los logros que consigue en la vida. La percepción de nuestras capacidades, formas de sentir o pensar, cómo nos vemos y sentimos en nuestro entorno. El autoconcepto es la imagen que tengo de mí mismo. Es lo que me gusta o quiero a esa imagen.
Es importante tener una imagen personal realista, dado que la consecución de nuestros objetivos, bienestar y la satisfacción en la vida, dependen en gran parte, de que la concepción que tenemos de nosotros mismos coincida con lo que somos capaces de hacer y conseguir. Esta coherencia permitirá que consigamos nuestros objetivos fácilmente y facilitará que nos sintamos bien con nosotros mismos.
La autoestima incrementa la confianza en uno mismo, la seguridad personal, facilita las relaciones con los demás, mejora el rendimiento social, mejora la calidad de vida personal, evita patologías, mejora la expresión emocional, potencia la asertividad, entre otras cosas.
Una baja autoestima posiblemente termina en fracasos, autolimitación, frustraciones y en no alcanzar las metas deseadas.
Causas de la autoestima baja
Existen dos tipos de autoestima:
Situacional: se muestra en situaciones concretas.
Caracteriológica: sensaciones generales y globales.
Las causas más frecuentes de los problemas en ambos tipos de autoestima son:
-Filosofía de vida errónea (juicios, exigencias).
-Reglas inflexibles o exigencias (normas o valores rígidos y «deberías» que generan culpabilidad).
-Perfeccionismo (rigidez en la ejecución o cumplimiento de tareas, lo que genera culpabilidad e inseguridad).
-Falta de autoafirmaciones y autorefuerzos.
-Vulnerabilidad a la crítica externa. (culpabilidad).
-Voz crítica interna.
La baja autoestima se puede formar en la niñez como resultado de:
-Ausencia del afecto y amor. Sentirse abandonado, se puede asociar con ser insignificante o incompetente
-Sufrir abusos físicos, verbales, sexuales o emocionales
-Sufrir durante la infancia críticas excesivas o destructivas. Posiblemente la persona pierda la confianza en sí mismo.
-Falta de apoyo, estímulo o afirmación
-Problemas de salud serios durante mucho tiempo.
-Cuando tenemos más fracasos que éxitos a lo largo de nuestra niñez y no los sabemos procesar y asimilar de forma sana.
-Nuestra apariencia física puede ser origen de una baja autoestima.
-Influencia negativa de los padres o la familia.
-Experiencias traumáticas.
Algunos síntomas de la Baja Autoestima
-Sentirse poco competente o poco capaz para realizar ciertas cosas.
-Sobregeneralizar. He fracasado una vez, me va volver a pasar.
-Valorarse de forma negativa e irrealista.
-Sentirse sin valor alguno.
-Falta de objetivos o establecerse metas personales inalcanzables o irrealistas.
-Sentirse poco querido.
-Tener miedo al cambio.
-Tener visión negativa o irrealista de su personalidad, capacidad o físico.
-Pensar que el resto de gente es mejor o hace las cosas de manera mejor.
-Verse involucrado en relaciones destructivas.
-Sentimientos de culpa y autoreproches frecuentes.
¿Cómo subir la autoestima?
La terapia para personas con problemas de autoestima ayuda a eliminar la autocrítica, aceptar la imagen que tenemos de nosotros mismos, a no juzgarnos ni exigirnos de forma rígida, aprender a que no nos afecte la opinión de los demás, a ser independientes emocionalmente de los demás, etc.
Durante la terapia para problemas de autoestima se entrena a la persona a pensar de forma más auto-afirmativa y realista respecto a sí misma y se le ayuda a potenciar la autoaceptación y a eliminar los juicios de valor, la autocrítica y las creencias limitantes que puedan influir en su vida cotidiana.
Una autoestima sana es imprescindible para mantener una buena salud emocional. Los problemas de autoestima pueden ser un problema en sí mismos o también pueden ser un síntoma recurrente en múltiples patologías emocionales como depresión, miedos, fobias, ataques de pánico, etc.